lunes, abril 21, 2008

Hoy no estoy para nadie

Hoy no quiero sonreír
porque el simple hecho de hacerlo
me asquea.

Lo sociable de mi ser
hoy se convierte en púas.
Lamento los inconvenientes.

Minutos y horas, segundos,
sonidos, toques, sabores,
no tienen profundidad.

En realidad no lamento nada
si alguien sale herido
no es mi culpa.

Hoy merezco no estar,
no ser percibida,
y ni siquiera que me hablen.

Hoy no soy yo,
o tal vez sí lo soy,
finalmente, al 100%.